CUIDADO DE TUS FLORES Y PLANTAS DE SEDA


Incluso las flores y plantas de seda más exclusivas merecen un poco de atención para mantener su apariencia impecable. Siguiendo estos sencillos pasos, conservarán su belleza y encanto como el primer día.

Evita la luz solar directa

Aunque nuestras flores y plantas de seda están elaboradas con materiales de alta calidad y resistentes a la decoloración, la exposición prolongada al sol puede causar una leve pérdida de color. Colócalas en espacios con luz indirecta para conservar su intensidad natural.

Espolvorea de vez en cuando

Una limpieza ligera marca la diferencia. Usa un plumero suave o un secador de pelo en el nivel más bajo y con aire frío para eliminar el polvo de tus flores de seda. Para las plantas de seda, lo ideal es un paño suave o ligeramente húmedo.

No las laves con agua

El agua puede dañar las texturas delicadas de los pétalos y hojas de seda. Límpialas siempre con suavidad y mantenlas completamente secas, especialmente en el caso de los ramos.

Guárdalas con cuidado

Si decides rotar tus arreglos por temporadas, guárdalos en un lugar fresco y seco. Protégelos con papel de seda para mantener su forma y evitar la acumulación de polvo. Un pequeño gesto de cuidado garantiza una belleza duradera.